Nuestro querido Lolo ha vuelto a pasar por quirófano. La chica que lo tiene en acogida y cuida de él lo notaba aún bastante cojo de una de sus patas traseras y le parecía que su cadera crujía un poco cuando lo cogía en brazos. Decidimos volver a hacer radiografías y se detectó una fractura en la cabeza del fémur que no se había visto antes porque el hueso no estaba desplazado. Como no podía ser de otra forma, enviamos a Lolo nuevamente a la clínica de Mieres para que lo operaran de esta nueva dolencia. A día de hoy ya vuelve a estar en su casa de acogida y poco a poco se va recuperando. Es un luchador y estamos seguras de que en poquito tiempo estará como nuevo. Obviamente, los gastos se han disparado un poco y necesitamos recuadar fondos para pagar la cirugía de Lolo, así que todos los donativos y aportaciones serán bienvenidos.

Os mantendremos informados de la evolución de Lolo, que no pierde la esperanza de encontrar un hogar definitivo.