Una vez más, os escribimos para informaros de lo acontecido durante este mes de agosto.

Este mes no sumamos ningún socio nuevo y tampoco ninguna baja, así que nos mantenemos como estamos.  

En cuanto a entradas de animales nuevos, sólo hemos hecho un ingreso en este último mes. Se trata de Olaf, un gatito bebé que se metió en un taller de coches y no quería salir. Nos avisaron y colocamos una jaula trampa para poder cogerlo; al día siguiente ya lo teníamos con nosotras. Es un peluchito blanco de unos 3 meses de edad, aterrado pero buenísimo. No conocemos nada de su corto pasado, pero el pobre estaba muy asustado, aunque en ningún momento nos hizo un feo (ni un bufido siquiera). Lo llevamos al veterinario para que lo revisaran y salvo ácaros en los oídos, por lo demás está estupendo; se aprovechó para desparasitarlo tanto por dentro como por fuera y ya está en una casa de acogida donde guardará cuarentena una temporadita hasta que se recupere de los ácaros. En tan solo un par de días ya se mostraba un poco más confiado y comenzaba a pedir mimos, así que estamos seguras de que dentro de nada será un saquito de ronroneos. En cuanto esté listo, le buscaremos el mejor de los hogares.

La otra gran noticia es que Yoshirin, el gato mecánico que llegó en el motor de un coche, ya ha encontrado su familia definitiva!! Tras recuperarse de una otitis por ácaros y ser vacunado, ya disfruta de un hogar de verdad. Las fotos que nos manda su nueva familia nos dejan verle disfrutando de una vida de mimos y comodidades, como debe ser!!

Por lo demás, tenemos poco que contaros.

Deví y Pepa siguen sin novedades. Nadie pregunta por ellas y es muy frustrante ver cómo pasan los meses y siguen esperando su oportunidad, que parece que nunca llega… Nosotras no tiramos la toalla y seguiremos luchando por una familia para cada uno de ellas.

Carbón, este mes no dio un pequeño susto y se fue a vivir una aventurilla pasajera; se escapó de su casa de acogida y, aunque se realizaron varias batidas para buscarlo, acabó volviendo solito, sano y salvo, por suerte. Seguimos pendientes de poder organizarnos para llevarlo a Mieres a consulta con el traumatólogo que lleva su caso.

Harlem, la panterita negra, lleva menos tiempo con nosotras, pero tampoco nadie ha preguntado por él… Crucemos los dedos para que no se sume a la lista de los veteranos cansados de esperar el final feliz de su cuento.

En cuanto a Terry, está estupendo, con su artrosis a cuestas, pero la mar de feliz en su casa de acogida. Se lleva de maravilla con sus compis de cuatro patas y disfruta mucho de los paseos. Esperamos poder encontrarle un hogar definitivo, aunque sabemos que los abueletes, por desgracia, siempre lo tienen más complicado. Pero Terry no se rinde y nosotras mucho menos, así que mientras sus huesos aguanten continuaremos buscando una familia para él.

Con respecto al Proyecto CES, cero novedades. No hemos podido reanudar todavía las capturas, así que nos espera un otoño/invierno complicado porque este año, con todas las restricciones debidas a la pandemia y estas cosas, han nacido más camadas que en los dos últimos años, desde que empezamos con el proyecto. Así que nos tocará darle caña en cuanto podamos para volver a coger buen ritmo y seguir estabilizando el número de gatos de las colonias. Hemos de decir que una de las dificultades que nos impide ir más rápido es la falta de apoyo, voluntarios que no ayuden a custodiar las jaulas, hacer los traslados a la clínica veterinaria, etc. Nosotras somos solo dos personas con muchas ganas, pero tenemos nuestros trabajos, nuestras familias, y a veces es complicado llegar a todo. Por eso queremos aprovechar para hacer un llamamiento a aquellas personas que quieran involucrarse en esta bonita pero dura tarea; si os apetece colaborar de forma activa, ponéos en contacto con nosotras!

Por otro lado, este mes hemos recibido una gran donación de pienso para nuestros gatos callejeros; la donación viene de la Fundación Affinity, con quien llevamos un par de años colaborando para la realización de estadísticas de abandonos y como agradecimiento por esta colaboración no han hecho llegar 300 kilos de pienso, que serán distribuidos entre las alimentadoras de las colonias. Nos viene genial, porque este año no hemos podido hacer eventos, ni operaciones saco, ni mercadillos y las reservas de alimento estaban bajo mínimos (de hecho, ya el mes pasado tuvimos que hacer una compra para poder seguir alimentando a los callejeritos); así que esto nos permite un pequeño alivio, al menos durante una temporada.

Por el momento, estas son las novedades que os podemos contar. Como siempre, os seguiremos manteniendo informados de todo lo acontecido para que podáis sentiros parte de esta pequeña gran familia.

Muchas gracias!!!